Varias veces me ha tocado escuchar: “si ya estoy tomando pastillas, ¿para qué usar condón?”. Suena lógico ¿no?, digo, ya nos estamos cuidando... Estamos siendo responsables para no tener un embarazo no planeado, pero…¿y las infecciones de transmisión sexual?
¿Sabías que los y las jóvenes somos las personas con más probabilidad de contagiarnos de una infección de transmisión sexual?, Y que ¿la única manera de protegernos es utilizando condón masculino o femenino? Cuando usamos condón, nos protegemos de las infecciones y además, además de protegernos para evitar un embarazo no planeado.
¿Qué puedo hacer si hay dos cosas que cuidar? Aquí te dejamos 4 pasos que te pueden servir:
- Habla y habla sobre el condón: Si tu pareja te ha dicho que no quiere usar condón, pregúntale por qué, casi siempre es por algún problema que se puede resolver muy fácil, como cambiando de marca, o cambiando de condón masculino a femenino. Checa nuestro video respuestas para negociar el uso del condón.
- Encuentren el mejor método anticonceptivo: Ve a la sección de métodos infórmate sobre las opciones de métodos anticonceptivos que tienen tú y tu pareja, platiquen con su proveedor de salud para que los ayude en el proceso de decisión. Una vez que decidan ¡ÚSENLO BIEN! y NO dejen de usar condón.
- Sigue usando condones: Usar un método anticonceptivo de larga duración (como inyecciones, implantes o DIU) es excelente opción para prevenir un embarazo, pero no te protege contra infecciones de transmisión sexual. No dejes de usar condones sólo porque tú o tu pareja están usando otro método. No importa que estén en una relación exclusiva, SIEMPRE usen condón.
- No dejes tus anticonceptivos sin consultarlo: Es común que la primera vez que usas un método no te acomodes al 100% o que se te olvide cambiarlo o tomarlo siempre. Los efectos secundarios que se sienten al principio generalmente se quitan, ten un poco de paciencia, pero si de plano quieres cambiar de método ve a los servicios amigables para que te orienten y NUNCA te quedes sin protección.
Utiliza un método anticonceptivo muy efectivo y combínalo con el condón. Así, tú y tu pareja tendrán protección en los casos de emergencia (ej: cuando se rompa el condón, o cuando se te olvide tomar una pastilla) y también evitarán infecciones de transmisión sexual.
¡Cuídense!
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